La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ya se pronunció ante el plan del presidente electo, Donald Trump, de ejecutar deportaciones masivas cuando llegue a la Casa Blanca.

Dice no estar de acuerdo con que se trate a los inmigrantes como criminales.

Tras la promesa de una deportación masiva de migrantes hecha por el presidente electo Donald Trump, el gobierno de México dio a conocer que ya tiene un plan para enfrentar cualquier escenario y así apoyar a los mexicanos que se vean afectados por la medida.

"En caso de que hubiera deportaciones, nosotros vamos a recibir a los y las mexicanos y tenemos un plan para ellos, pero vamos a trabajar previo a ello en demostrar que no tienen por qué deportarse", agrega Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México.

La mandataria mexicana rechazó que para las deportaciones se tenga que usar al ejército en Estados Unidos al declarar un estado de emergencia y, lo que sería un hecho sin precedentes.

"Evidentemente, no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo", agrega Sheinbaum.

Y mientras eso sucede, otra caravana con más de mil quinientas personas salió de Tapachula, Chiapas, para dirigirse a la frontera de México con los Estados Unidos, esta sería la sexta caravana que busca llegar a la frontera e ingresar antes de que Trump asuma la presidencia.

"Lo mejor será tener un proceso organizado de la migración, para que entre de manera organizada y tenga nuestros datos nuestro lugar de proveniencia, nuestras ocupaciones, nuestros rostros que tengan una migración que quiera o no quiera va a entrar de igual manera", agrega Milko Chacoa, Migrante de Venezuela.

Por otro lado, los migrantes que ya están en la frontera  que esperan su cita de asilo temen que, a pesar de haber hecho el trámite de forma legal, sean deportados.

"Porque nosotros vamos con metas, vamos con sueños, ilusiones de salir adelante, porque somos personas buenas trabajadoras, como hay malas, pero somos más buenos que malos", agrega Scarlett Rodríguez, migrante venezolana.

De acuerdo la propuesta del futuro presidente Trump la deportación sería de un millón de personas cada año, lo que aún no queda claro y que tendría que preocupar al gobierno de este país, es a donde irían los migrantes de otros países una vez deportados, se quedarían en México o los regresarían a su país.