El exfiscal del condado de Starr fue condenado el martes a 37 meses de prisión federal después de aceptar 44.000 dólares en sobornos, según un comunicado de prensa de la Oficina del Fiscal Federal del Distrito Sur de Texas.

Víctor Canales Jr., de 51 años, se declaró culpable de un cargo de extorsión el 5 de septiembre de 2023. Se le permitió permanecer en libertad bajo fianza y entregarse voluntariamente a una instalación de la Oficina de Prisiones de EE.UU.

Según un comunicado de prensa, Canales fue el Fiscal electo del Condado de Starr responsable de procesar delitos menores durante 17 años a partir de 2005.

Según informes anteriores, Canales malversó bienes y robó de programas federales mientras se desempeñaba como Fiscal del Condado Starr.

"El tribunal escuchó el testimonio de un auditor de la Oficina del Fiscal General de Texas que describió los depósitos en efectivo realizados en las cuentas personales de Canales y su uso de los fondos de la cuenta del Fiscal del Condado de Starr", señaló el comunicado de prensa. "Al imponer la sentencia, el tribunal determinó el importe de los sobornos en 44.000 dólares".

En un caso, Canales intentó que se retiraran tres cargos por delitos menores contra un hombre después de que la madre de este pagara a Canales 1.500 dólares. Canales depositó el dinero en su propia cuenta corriente en lugar de depositarlo en la cuenta del condado de Starr, añade el comunicado.

"Los fiscales de todas las tendencias, ya sea a nivel federal, estatal o de la ciudad, se definen por un juramento, uno para servir y proteger a sus comunidades. Es un juramento que solo busca una cosa: la justicia", declaró el fiscal federal Alamdar S. Hamdani en el comunicado de prensa. "Víctor Canales Jr. violó ese juramento y la confianza de los residentes del condado de Starr a cambio de decenas de miles de dólares en sobornos. Como una oficina de servidores públicos dedicados, incluyendo 200 fiscales, la Oficina del Fiscal Federal para el Distrito Sur tiene poca paciencia para los funcionarios corruptos, especialmente cuando un fiscal intercambia su autoridad, su juramento, para beneficio personal."

La sentencia de Canales irá seguida de tres años de libertad supervisada.