Acusan a un hombre de Donna de homicidio capital tras la muerte de su hija
Un hombre de Donna que, según las autoridades, admitió haber abusado de su hija fue acusado de asesinato capital en relación con su muerte.
José Manuel Uresti, de 23 años, se encuentra detenido sin derecho a fianza.
Según el sheriff del condado Hidalgo, Eddie Guerra, Uresti confesó haber mordido y golpeado a la niña en varias ocasiones.
En una conferencia de prensa celebrada el lunes después de la acusación de Uresti, Guerra calificó la investigación como un "caso desgarrador que ha impactado profundamente a nuestra comunidad".
Como se informó anteriormente, la oficina del sheriff respondió a un informe de un niño que no respondía el jueves en la cuadra 9700 de Klarrisa Drive en la zona rural de Donna alrededor de las 4:30 p. m.
Guerra dijo que los agentes que se encontraban en el lugar encontraron a la madre de la menor y esposa de Uresti —Wendy Sarai Rivera, de 25 años— y a otra persona practicándole RCP al niño. La menor fue hospitalizada y declarado muerta una hora después del informe inicial.
De acuerdo al registro policial, la niña tenía “varios hematomas en la cara, torso, piernas y marcas de quemaduras y mordeduras en las piernas y el área del pecho, además de laceraciones”, informó Guerra en la conferencia de prensa.
Según Guerra, Rivera dijo a los investigadores que Uresti la había dejado en ese lugar para que le hicieran las uñas. Uresti luego llamó a Rivera para decirle que la niña no respiraba y luego llegó al lugar para intentar obligarla a subir a su vehículo.
“Ella sacó al niño del auto y Uresti huyó”, dijo Guerra.
Los investigadores se enteraron de que el incidente se originó en la casa móvil de los padres en la cuadra 130 de Eldora Road.
Rivera dijo a los investigadores que ella sabía del abuso que Uresti había cometido contra su hija, y fue procesada el viernes por cargos de lesiones a una niña y de no denunciar un delito grave.
Los investigadores se enteraron de que Uresti huyó a Río Bravo, pero se entregó a las autoridades en el Puente Internacional Anzalduas el sábado y fue puesto bajo custodia.
“Uresti afirmó que el día de la infracción había abofeteado a la niña en la cara 'en aras de la disciplina' y que ella quedó inconsciente”, dijo Guerra, añadiendo que Uresti luego confesó haber sacudido a la niña “en pánico”.
“Este caso resalta la importancia de identificar y denunciar señales de abuso”, agregó Guerra.
Los registros de la cárcel muestran que Rivera permanece bajo custodia con una fianza de 2,5 millones de dólares.