En Weslaco, el departamento de seguridad pública cuenta con 700 empleados para su laboratorio criminal, y con tecnología avanzada para poder solucionar crimines de manera más eficaz.

Biología forense, la cual estudia el ADN, entre otras 4 divisiones, se investigan en el laboratorio criminal del departamento de seguridad pública de Weslaco. Siendo el único en El Valle del Río Grande, recibe la evidencia de más de 20 condados cercanos, para luego entregar los resultados  a la fiscalía. 

"Procesamos la evidencia, cualquier tipo que se somete y esto es evidencia factual que entregamos al fiscal, a  la corte y dejamos al jurado que haga su decisión, basado en los resultados de las pruebas", agrega Sgt. Maria Hernández, portavoz DPS

El fiscal del condado Hidalgo, Terry Palacios, nos dice que los resultados del ADN son esenciales para probar un caso; sin embargo, son los que más tardan en llegar. Por eso los avances en los laboratorios criminales son de suma importancia.

“Es donde agarramos los químicos del cuerpo para ver si hicieron el delito o no, es muy importante para el estado y para los abogados para saber si lo hizo su defendido o no aquí, también se realizan otros estudios, entre ellos”, agrega Terry Palacios, fiscal co. Hidalgo.

Esta es la chimenea de uno de los dos incineradores, con los que cuenta el departamento de seguridad pública para quemar drogas confiscadas, precisamente esta chimenea o incinerador quema hasta 200 libras , pero existe otra fuera de la vista que puede destruir hasta 5.000 libras de marihuana.

Para detectar huellas digitales se cuenta con un laboratorio de alta tecnología, el cual brinda resultados más acertados que hace 20 años.