Es una droga que continúa siendo prevalente. 

En Estados Unidos, por lo menos dos decenas de estados han legalizado el uso recreacional del cannabis, pero la preocupación sobre esta droga aún continúa.

Sarah Keim es la principal autora de un estudio sobre los efectos de la exposición del cannabis durante el embarazo.

“Creo que algunas veces la gente cree que porque el cannabis viene de una planta debe ser seguro, y no es realmente así,” Keim comento.

De los niños que participaron en el estudio, quienes tuvieron una exposición prenatal a la droga, muchos de ellos tenían impactos tanto en el comportamiento como en la parte cognitiva, según los investigadores.

“En promedio, tienen más dificultades controlando sus impulsos y poniendo atención”, explico Keim. “Tienen una baja habilidad para planificar y una alta probabilidad de tener comportamiento agresivo en comparación con los niños que no tuvieron una exposición prenatal al cannabis".

Keim dice que un creciente número de personas acuden al cannabis por temas como náuseas, problemas con el sueño, estrés, depresión, y todo eso se presenta comúnmente durante el embarazo. Pero Keim dice que usar el cannabis para aliviarlo significa un riesgo también para la persona embarazada.

“Creo que es importante que los pacientes sepan que existen opciones mejores y más seguras para lidiar con esos problemas que el cannabis”, dijo Keim.

Los centros para el control y prevención de enfermedades indican que el uso del cannabis afecta partes del cerebro y puede afectar la memoria, el aprendizaje, la atención, la capacidad de tomar decisiones, la coordinación, las emociones y los tiempos de reacción.

Sus efectos son especialmente preocupantes en niños y adolescentes, debido a que sus cerebros están en desarrollo.

Vea el video para el reporte completo.