Nuevo avance en la lucha contra el VIH logra remisión en niños pequeños
39 millones de personas en todo el mundo viven con HIV, el virus que conduce al SIDA. Ahora, un nuevo avance que afecta a los pacientes más jóvenes.
En los 80, contraer el VIH se consideraba una sentencia de muerte. En los 90, el VIH era la primera causa de muerte entre los estadounidenses de 25 a 44 años. En la actualidad, existen medicamentos antivirales que pueden mantener con vida a las personas infectadas con el virus hasta los 70 y 80 años. Incluso existen medicamentos que pueden reducir el riesgo de que una persona contraiga el VIH a casi cero.
En 2013, una niña conocida como la bebé de Mississippi saltó a los titulares al convertirse en el primer caso de remisión del VIH en un niño pequeño, pero dos años después, el virus reapareció. Los investigadores han tardado más de una década en reproducir esa cura funcional. La pediatra del Johns Hopkins Deborah Persaud forma parte del equipo de ensayo clínico que utiliza la terapia ART, o terapia anti-retro-viral, un cocktail de medicamentos administrados en las 48 horas siguientes al nacimiento.
"Es importante hacerlo muy pronto porque creemos que impide que el virus se establezca realmente en un punto de apoyo muy grande", agrega Deborah Persaud, MD, Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins.
El tratamiento estándar de los bebés con VIH suele comenzar dos o tres meses después del nacimiento y se prolonga durante décadas. En este nuevo ensayo participaron 54 recién nacidos que recibieron terapia artística a los pocos días de nacer. A los cinco años y medio de edad, tras suspender la medicación contra el VIH, cuatro de estos niños lograron la remisión.
"Es un número pequeño de casos, son cuatro, pero es realmente transformador para nuestro campo", agrega Doctora Deborah Persaud.
Cada año se infectan 130.000 niños con el virus de la inmunodeficiencia humana. Curiosamente, no todos los niños nacidos de madres infectadas por el virus de la inmunodeficiencia humana están infectados. El virus de la inmunodeficiencia humana puede transmitirse de madre a hijo durante el embarazo, el parto y la lactancia.