Evalúan nuevos métodos para aliviar el dolor crónico sin fármacos
En temas de salud, el dolor crónico y la depresión resistente al tratamiento afectan a millones de personas. Estas pueden ser debilitantes y dejar a la gente sin esperanza, afectando sus actividades diarias, relaciones y el trabajo.
Sin embargo, los científicos recurren a una nueva forma de aliviar el dolor crónico y la depresión sin fármacos.
Anna Hansen adora ver crecer sus plantas. Sin embargo, el dolor crónico la obligó a trasladar su jardín al interior. "Cultivo plantas de interior porque ya no puedo dedicarme tanto a la jardinería", expresó.
Padeciendo endometriosis desde que tenía solo 15 años, Anna pasó años tomando opioides. Pero el dolor persistía.
"Estas personas, con dolor crónico o depresión, están atrapados en una especie de bucle de la actividad cerebral que es patológica", comentó Tom Riis, ingeniero biomédico de la Universidad de Utah.
Tom Riis y Jan Kubanek, ingenieros biomédicos de la Universidad de Utah, han desarrollado el dispositivo Diadem, que utiliza ultrasonido para localizar áreas profundas del cerebro asociadas con el dolor crónico y la depresión.
Después de mapear el cerebro con una imagen de resonancia magnética, Diadem utiliza 252 haces de ondas de sonido para localizar áreas tan pequeñas como un cacahuete.
"Después de 30 segundos de sonicación, serán capaces de decir que se sienten más relajados o hasta un poco más ligero. Por primera vez, podemos tratar o al menos aliviar los síntomas de muchas personas", agregó Tom Riis.
En el ensayo sobre dolor crónico, el 75 por ciento de los participantes experimentó una reducción significativa inmediatamente después del tratamiento. En cuanto a la depresión, el 58 por ciento remitió tras una sola sesión.
Anna Hansen, una paciente con dolor crónico, permaneció en remisión durante más de 44 días.
Anna dice que sintió un alivio inmediato y que en una semana ya no tenía dolor. "Siento que puedo hacer cosas porque al principio eres muy prudente. No quieres hacer nada que pueda desencadenar su reaparición. Me han devuelto la vida y me siento muy bien", expresó.
Estos investigadores trabajan para acelerar la aprobación de la terapia por ultrasonidos para el dolor crónico y la depresión mediante una doble estrategia con la FDA.
Si se aportan pruebas sólidas de seguridad, podrían estar disponibles antes, posiblemente incluso el año que al hacer asequible y accesible la terapia por ultrasonidos.
Esta innovadora tecnología podría cambiar la forma de tratar estas dolencias.