Evalúan los riesgos de enfermedades en la recuperación después del parto
Tener un bebé puede ser uno de los momentos más felices de la vida de una mujer.
Sin embargo, también se considera uno de los más peligrosos.
Estados Unidos tiene la tasa de mortalidad materna más alta de todos los países de renta alta, y las mujeres de raza negra son las que corren mayor riesgo.
Diez deditos en las manos y diez en los pies: todo parece perfecto, pero los días y meses posteriores al parto pueden poner en peligro la vida.
"Puede ser un momento muy peligroso en la vida de una mujer", comentó Candace Knight, doctora en filosofía, enfermera registrada del área metropolitana de Alabama.
La mayoría de las muertes de mujeres en EE. UU. tras el parto se deben a problemas de salud mental, hemorragias excesivas y problemas cardíacos.
Un estudio de la revista americana de obstetricia y ginecología señala que las embarazadas negras tienen tres veces más probabilidades de morir que las blancas.
"El lugar de residencia determina el acceso a la atención sanitaria, ¿verdad? También su estatus socioeconómico determina su acceso a la atención sanitaria", agregó Candace Knight.
Según la CDC, el ochenta por ciento de todas las muertes relacionadas con el embarazo en los Estados Unidos son evitables. Por eso, la escuela de enfermería de la UAB es una de las primeras del país en asegurarse de que todas las mujeres embarazadas tengan acceso a la atención sanitaria.
"Atendemos a mujeres que viven en la pobreza", expresó Candace Knight.
En su asociación enfermera-familia, la enfermera se convierte en la defensora de la familia. "Estas enfermeras salen desde el embarazo hasta el segundo cumpleaños del bebé", dijo Candace Knight.
En la asociación informan a las madres sobre los recursos disponibles, las ayudan a comunicarse con su equipo sanitario y les enseñan a desenvolverse en el sistema.
"Es realmente lo que la familia necesite", informó Candace Knight.
Misisipi tuvo la mayor mortalidad materna, seguido de Nuevo México. Mientras tanto, California y Massachusetts registraron las más bajas.
La CDC ha creado el programa de eliminación de la mortalidad materna, que colabora con 39 estados para ayudar a poner en práctica intervenciones dirigidas a prevenir las muertes relacionadas con el embarazo.